LA CATÁTROFE DE JAPÓN
de Bartolomé López Lara, el Viernes, 11 de marzo de 2011 a las 18:52
Lo ocurrido en Japón nos hace ver una vez más lo insignificante que es el hombre ante la Naturaleza, cuando ésta tiembla como lo ha hecho hoy, y también que cuando se desata con tal fuerza arrolladora sirven de bien poco las defensas antisísmicas con las que se dota en evitación del desastre, como en este caso y en otros de semejante calibre.
Edificios que se caen, enormes grietas que se abren engullendo lo que había encima, sunamis de diez metros de altura que invaden la tierra cinco kilómetros inundando todo lo que encuentran a su paso....¿ Cómo se evita esto ?
El hombre no puede hacer nada que le de seguridad plena ante este tipo de fenómenos, salvo que la fuerza del seísmo sea más pequeña. Se halla completamente impotente, desarmado.
De momento, cuando la tragedia acaba de tener lugar, y después, durante cierto tiempo, mientras el dolor por la pérdida de los seres queridos y de los bienes materiales es aún muy fuerte, todos los afectados por la horrible desgracia ( no digo el mismo día, pues en estos momentos de dolor tan profundo no se puede ni siquiera pensar, solo hay lugar para el lamento y para llorar desconsoladamente ) se harán muchas preguntas: ¿ Por qué ?...¿ Por qué ?....¿ Por qué ?......, y no hallarán posiblemente respuesta a ninguna de ellas. Las reacciones de cada uno de ellos serán tan diversas y variables como variables y diversos somos todos: unos, tal vez, sientan que todo lo que ocurre pasa porque los hombres no nos portamos bien unos con otros, otros porque hemos dejado a un lado a Dios, muchos creyentes porque nos estorba para vivir la vida que queremos, otros que es imposible que exista Dios, y que si existe no es ese Dios bueno en el que creemos, sino malo, muchos renegarán de Él y dejarán de creer, otros, sin embargo, creerán más todavía y se aferrarán más a Él que nunca, y es hasta posible que muchos no creyentes, ante la magnitud de la catástrofe, y vivamente impresionados por lo ocurrido, empiecen a creer en Dios y piensen que lo sucedido es un modo más del que se vale, por terrible que haya sido, para seguir advirtiendo a la Humanidad de que tiene que variar el rumbo de su vida porque las injusticias son cada vez mayores y más frecuentes en el mundo, y como " con arreglo al santo así es la medalla ", los cataclismos son cada vez mayores, porque cada vez es mayor la sordera del mundo par oir las continuas llamadas de Dios para que se siga su Camino, que es Camino de Justicia y de Paz, frutos del amor, amor que no se practica apenas en la Tierra, ni entre las personas, ni de éstas hacia el resto de los seres de la Creación, resultado de lo cual son todas las cosas malas que nos ocurren ( contaminación, capa de ozono, plagas, calentamiento global, guerras...........).
¿ Se acerca el fin de los tiempos ? Nadie lo sabe con seguridad. Puede que sí, puede que no. Pero..¿ y si es que sí ? Creo que el mundo entero, por lo menos el Occidental, sabe que circula el rumor de que este fin será el año próximo, 2.012, según el calendario Maya. Pero hay más predicciones sobre ello, entre ellas, según creo, la de Nostra Damus.
A mi entender creo que todos hemos de tomarnos muy en serio lo que está ocurriendo, sea éste el final de los tiempos o no lo sea, y tomar las medidas oportunas para que el mundo no se nos vaya de las manos. Y he dicho TODOS, pero, principalmente, aquellos que tienen en sus manos el poder, ya económico, ya político, ya de la índole que sea, porque es hora ya de que todo cambie. Es hora ya de que los hombres cambien su sistema de vida, porque ni este actual, ni ninguno antes han sido capaces de dar a cada uno lo que se merece realmente, ni se ha tratado a las gentes con el respeto a que tienen derecho por su dignidad, que sigue siendo pisoteada en todo el mundo de muy diversas maneras y a todos los niveles, incluído el familiar.
Ni el capitalismo, ni el comunismo, ni el nazismo, ni el humanismo, cristiano o no, nii el liberalismo, ni el socialismo, ni la república, ni la dictadura, ni la democracia, ni ningún otro sistema ideado por los hombres será jamás un sistema justo, porque falla lo principal: nosotros, que no lo somos. Y resulta que tenemos la solución, que es lo más triste, pero no la queremos aplicar porque no nos interesa, ya que nuestro egoísmo lo impide. ¿ Hace falta decir cuál es esa solución ? No, pero lo voy a decir: Es JESUCRISTO, Dios y hombre verdadero. Él es la única solución para que todo lo malo termine y empiece lo bueno para siempre.
Lamentablemente, y por muchas que sean las desgracias que queden por venir, y aunque sean peores aún que la de hoy en el Japón, todo seguirá igual, eso lo sabemos todos. Yo también, pero saberlo no me impide decir todo lo que estoy diciendo. Debo hacerlo, y, como dice el refrán a quien Dios se la dé, san Pedro se la bendiga ".
Que Dios nos pille confesados.
Buenas tardes y hasta la próxima.
Edificios que se caen, enormes grietas que se abren engullendo lo que había encima, sunamis de diez metros de altura que invaden la tierra cinco kilómetros inundando todo lo que encuentran a su paso....¿ Cómo se evita esto ?
El hombre no puede hacer nada que le de seguridad plena ante este tipo de fenómenos, salvo que la fuerza del seísmo sea más pequeña. Se halla completamente impotente, desarmado.
De momento, cuando la tragedia acaba de tener lugar, y después, durante cierto tiempo, mientras el dolor por la pérdida de los seres queridos y de los bienes materiales es aún muy fuerte, todos los afectados por la horrible desgracia ( no digo el mismo día, pues en estos momentos de dolor tan profundo no se puede ni siquiera pensar, solo hay lugar para el lamento y para llorar desconsoladamente ) se harán muchas preguntas: ¿ Por qué ?...¿ Por qué ?....¿ Por qué ?......, y no hallarán posiblemente respuesta a ninguna de ellas. Las reacciones de cada uno de ellos serán tan diversas y variables como variables y diversos somos todos: unos, tal vez, sientan que todo lo que ocurre pasa porque los hombres no nos portamos bien unos con otros, otros porque hemos dejado a un lado a Dios, muchos creyentes porque nos estorba para vivir la vida que queremos, otros que es imposible que exista Dios, y que si existe no es ese Dios bueno en el que creemos, sino malo, muchos renegarán de Él y dejarán de creer, otros, sin embargo, creerán más todavía y se aferrarán más a Él que nunca, y es hasta posible que muchos no creyentes, ante la magnitud de la catástrofe, y vivamente impresionados por lo ocurrido, empiecen a creer en Dios y piensen que lo sucedido es un modo más del que se vale, por terrible que haya sido, para seguir advirtiendo a la Humanidad de que tiene que variar el rumbo de su vida porque las injusticias son cada vez mayores y más frecuentes en el mundo, y como " con arreglo al santo así es la medalla ", los cataclismos son cada vez mayores, porque cada vez es mayor la sordera del mundo par oir las continuas llamadas de Dios para que se siga su Camino, que es Camino de Justicia y de Paz, frutos del amor, amor que no se practica apenas en la Tierra, ni entre las personas, ni de éstas hacia el resto de los seres de la Creación, resultado de lo cual son todas las cosas malas que nos ocurren ( contaminación, capa de ozono, plagas, calentamiento global, guerras...........).
¿ Se acerca el fin de los tiempos ? Nadie lo sabe con seguridad. Puede que sí, puede que no. Pero..¿ y si es que sí ? Creo que el mundo entero, por lo menos el Occidental, sabe que circula el rumor de que este fin será el año próximo, 2.012, según el calendario Maya. Pero hay más predicciones sobre ello, entre ellas, según creo, la de Nostra Damus.
A mi entender creo que todos hemos de tomarnos muy en serio lo que está ocurriendo, sea éste el final de los tiempos o no lo sea, y tomar las medidas oportunas para que el mundo no se nos vaya de las manos. Y he dicho TODOS, pero, principalmente, aquellos que tienen en sus manos el poder, ya económico, ya político, ya de la índole que sea, porque es hora ya de que todo cambie. Es hora ya de que los hombres cambien su sistema de vida, porque ni este actual, ni ninguno antes han sido capaces de dar a cada uno lo que se merece realmente, ni se ha tratado a las gentes con el respeto a que tienen derecho por su dignidad, que sigue siendo pisoteada en todo el mundo de muy diversas maneras y a todos los niveles, incluído el familiar.
Ni el capitalismo, ni el comunismo, ni el nazismo, ni el humanismo, cristiano o no, nii el liberalismo, ni el socialismo, ni la república, ni la dictadura, ni la democracia, ni ningún otro sistema ideado por los hombres será jamás un sistema justo, porque falla lo principal: nosotros, que no lo somos. Y resulta que tenemos la solución, que es lo más triste, pero no la queremos aplicar porque no nos interesa, ya que nuestro egoísmo lo impide. ¿ Hace falta decir cuál es esa solución ? No, pero lo voy a decir: Es JESUCRISTO, Dios y hombre verdadero. Él es la única solución para que todo lo malo termine y empiece lo bueno para siempre.
Lamentablemente, y por muchas que sean las desgracias que queden por venir, y aunque sean peores aún que la de hoy en el Japón, todo seguirá igual, eso lo sabemos todos. Yo también, pero saberlo no me impide decir todo lo que estoy diciendo. Debo hacerlo, y, como dice el refrán a quien Dios se la dé, san Pedro se la bendiga ".
Que Dios nos pille confesados.
Buenas tardes y hasta la próxima.
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