martes, 8 de marzo de 2011

CONOCER LOS CONTENIDOS BÍBLICOS NO SIEMPRE ES SINÓNIMO DE ESTAR EN LA VERDAD

SABER LOS CONTENIDOS DE LA BIBLIA NO ES SIEMPRE SINÓNIMO DE ESTAR EN LA VERDAD

de Bartolomé López Lara, el Martes, 08 de marzo de 2011 a las 11:20
     Sabemos que son muchas las personas que tienen una memoria prodigiosa y que son capaces de almacenar en ella todo lo que leen, sea de la materia que sea. E  igualmente sabemos que, se trate de lo que se trate, si nos conformamos con saberlo y después no lo llevamos a la práctica, es lo mismo que si tenemos muchos libros en la biblioteca, sin abrirlos siquiera. Nuestra memoria es semejante a una Biblioteca, pero nada más.
     En el caso de la Biblia sabemos que en ella está la Verdad, pero esa Verdad no está en nosotros, por más que sepamos lo que dice, si no la vivimos instante a instante. Y eso, vivir la Verdad, sí es estar en la Verdad, pudiendo ocurrir muy bien que personas que ni siquiera han leído la Biblia anden en la Verdad, mientras que otras que se la saben de memoria ( y tal vez presumen de ello ), están muy lejos de andar en la Verdad.
     Si amamos a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a nosotros mismos, tal como nos enseña Dios en los Mandamientos, andaremos en la Verdad, y al hacerlo, y hacerlo siempre ( perseverando en el amor a Dios y al prójimo, como nos amó Él -amaos unos a otros como Yo os he amado- ), el Señor nos revela sus misterios y hace que le conozcamos. Esa es la razón por la cual los " indoctos " del mundo a los que se refería san Agustín ( lo necio del mundo según san Pablo ), si cumplen la voluntad de Dios, adquieren su Sabiduría sin haber tenido necesidad de leer la Biblia. Se trata de personas sencillas y humildes que practican el amor desde que nacen hasta que mueren, a  los que Dios da su gracia, gracia que, sin embargo, no da a los soberbios, a los que rechaza.
   San Juan, en su primera carta, cap. 2, versos 20 y 21, dice: " CUANTO A VOSOTROS, TENÉIS LA UNCIÓN DEL SANTO ( se refiere al Espíritu Santo ) Y CONOCÉIS TODAS LAS COSAS. NO OS ESCRIBO PORQUE NO CONOZCÁIS LA VERDAD, SINO PORQUE LA CONOCÉIS Y SABÉIS QUE LA  MENTIRA NO PROCEDE DE LA VERDAD " . Y más adelante, en los versos 26 y 27, vuelve a decir: " OS ESCRIBO ESTO A PROPÓSITO DE LOS QUE PRETENDEN EXTRAVIAROS. LA UNCIÓN QUE DE ÉL ( de Jesús ) HABÉIS RECIBIDO PERDURA EN VOSOTROS, Y NO NECESITÁIS QUE NADIE OS ENSEÑE, PORQUE, COMO LA UNCIÓN OS LO ENSEÑA TODO Y ES VERÍDICA Y NO MENTIROSA, PERMANECÉIS EN ÉL, SEGÚN QUE OS ENSEÑÓ ".
  Démonos cuenta: La Unción perdura en ellos, y por eso no necesitan que nadie les enseñe. Pero como el Diablo no está quieto nunca, bien por sí, bien por sus demonios, bien por todos los que le siguen ( consciente o inconscientemente ), san Juan nos dice un poco antes: " LO QUE DESDE EL PRINCIPIO HABÉIS OÍDO  ( la Verdad ), PROCURAD QUE PERMANEZCA EN VOSOTROS. SI EN VOSOTROS PERMANECE LO QUE HABÉIS OÍDO DESDE EL PRINCIPIO, TAMBIÉN VOSOTROS PERMANECERÉIS EN EL HIJO Y EN EL PADRE " ( verso 24 ).
  Todo consiste, pues, EN PERMANECER EN LA VERDAD ( o en el amor de Dios, que es lo mismo, porque lo uno no puede ser sin lo otro ). Y si tal hacemos, entonces, y solo entonces será cuando permanezcamos en el Hijo y en el Padre, y, por tanto, les conoceremos, y la verdad estará en nosotros, y no solo la verdad, sino que también estaremos en la vida eterna, como nos dice en el verso 25: " Y ESTA ES LA PROMESA QUE ÉL NOS HIZO, LA VIDA ETERNA ". Y también en ( Jn. 17, 3 ), donde dice: " ESTA ES LA VIDA ETERNA, QUE TE CONOZCAN A TI, ÚNICO DIOS VERDADERO, Y A TU ENVIADO JESUCRISTO ".
    No basta sólo con tener la Unción del Santo para que no tengamos ninguna necesidad de ser enseñados por otros, porque creemos que el mismo Dios nos enseña. Hay que añadir, y decirlo bien claro, que es preciso, además, que tal Unción perdure en nosotros indefinidamente, para lo cual es preciso permanecer siempre en la Palabra y en el Amor de Dios, es decir, NO DEJAR DE CUMPLIR JAMÁS CON LA VOLUNTAD DE DIOS.
   Termino ya, pero antes quiero que todo lo anterior sea aclarado y ratificado por el propio Jesús. Para ello acudamos a san Juan de nuevo ( cap. 14, versos 15 a 17 ) : "  SI ME AMÁIS, GUARDARÉIS MIS MANDAMIENTOS, Y YO ROGARÉ AL PADRE, Y OS DARÁ OTRO ABOGADO, QUE ESTARÁ CON VOSOTROS PARA SIEMPRE, EL ESPÍRITU DE VERDAD, QUE EL MUNDO NO PUEDE RECIBIR, PORQUE NO LE VE NI LE CONOCE. VOSOTROS ( sus discípulos ) LE CONOCÉIS, PORQUE PERMANECE CON VOSOTROS Y ESTÁ EN VOSOTROS ".
  Todo consiste, pues, en amar a Jesús, pues sólo así guardaremos sus mandamientos, y al hacerlo el Padre nos manda otro Abogado ( al decir otro Abogado está claro que Él lo era también, puesto que nunca cesó de orar al Padre por nosotros ), QUE ESTARÁ CON NOSOTROS PARA SIEMPRE, el cual es el Espíritu de Verdad, y, por lo tanto, SEREMOS VERDAD, como Jesús, porque participaremos de ella.
  Obviamente el mundo, es decir, los que no aman a Jesús, no pueden tener ni conocer la verdad, porque no guardan sus mandamientos.
   Mañana, Dios mediante, acabaremos este trabajo.
   Hasta entonces, recibid todo mi amor.

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